Edoardo Molinari tiene 40 años y es el hermano mayor de Francesco (38). Juntos ganaron el campeonato mundial y han logrado cosas enormes para el golf italiano.
Lo apodan «Dodo» porque Francesco de chiquito no podía pronunciar bien el nombre Edoardo. Desde joven el mayor de los Molinari sorprendió por un talento impresionante, combinado con un carácter fuerte, bien tano, consiguió el US Amateur en 2005 y fue uno de los mejores amateurs del mundo. En el 2006 jugó el Open y el Masters, donde su hermano menor le llevó los palos. Pese a todo su éxito, decidió no hacerse profesional en ese momento, ni emigrar a las universidades estadounidenses; Dodo se quedó en su Turín natal e hizo la carrera y el Máster en Ingeniería.
Su carrera profesional no tuvo el éxito que prometía. Las lesiones en su muñeca lo castigaron demasiado, forzándolo a realizar cambios de swing que le costaron años y años de irregularidad. 6 triunfos en el Challenge Europeo y 3 en el European Tour.
Dodo es muy querido en el ambiente por ser muy divertido y carismático. Desde muy chico tomaba sus estadísticas y siempre se interesó en el tema. En los últimos años creó un software personalizado para recolectar y analizar sus estadísticas. Lo usó para conocer y mejorar su juego y el programa fue creciendo cada vez más.
Luego conoció a Mark Broadie, creador de la estadística Shot Gained y quedó fascinado con la fórmula que este utilizaba. Dodo la incorporó a su sistema y empezó a tener más y mejor información que el resto de los jugadores.
Hoy en día estamos acostumbrados a ver a los profesionales con todo el equipamiento tecnológico en el range, Trackman, apps, todo está estudiado y medido. Pero cuando Molinari se interesó en el tema los jugadores no le daban tanta importancia y no analizaban tanto los números.
Por ejemplo, gracias a su sistema Molinari pudo ver que dejaba la pelota más cerca desde 80 o 100 yardas, que desde 40 o 60, entonces modificó su estrategia para dejarse más tiros de esa distancia. Así..mil ejemplos más, porque su trabajo realizado en la dispersión fue fantástico. «Para qué lado suelo errar más, por cuántas yardas erré en cada caso» y trabajar el plan de juego y las decisiones a partir de esas conclusiones.
Para Edoardo los números ayudan a los profesionales a crear estrategias de juego más efectivas. Cree que la clave está en el analizarlo ANTES de la ronda, viendo cómo jugar cada hoyo de acuerdo a las tendencias de cada uno.
El enfoque es sumamente interesante y no es casualidad que su sistema @statisticgolf lo estén utilizando jugadores del calibre de Fitzpatrick y otros ganadores del tour europeo.
Edoardo es un golfista con una mente brillante y nos alegra verlo jugar el US Open de tan buena manera como lo hizo ayer. Ojalá que su aplicación siga creciendo en el mundo profesional y nos revele todos los secretos.